Decía Clint Eastwood interpretando a Harry el sucio: “La opinión es como el culo, cada uno tiene el suyo”. Y lo cierto es que razón no le falta, pregunta si no por tal o cual goma en tu grupo de colegas… ¿Ves, a que no se ponen de acuerdo? Lo paradójico es que, pese a que se sabe mucho de gomas, veo a peña que lleva las suyas casi en los alambres con lo que ello supone… Las nuestras no son como las motos de carreras que salen con neumáticos nuevos de cada vez, por lo que es vital mantenerlos en perfecto estado y no tacañear en ciertos gastos. No me extrañaría que hasta Harry conociera esta otra frase que decimos todos, y que cumplimos la mitad, justo la que sabe el porqué…: “Lo barato sale caro…”

Según Álvaro Gavín de Motociclismo.es, éstos son los 10 motivos para cambiar los neumáticos gastados y que yo también comparto.

Es domingo y estás a punto de salir a dar una vuelta con tu moto. Miras las ruedas y ves que están bastante tocadas, pero arrancas y sales a hacer curvas. Esta situación es más habitual de lo que puedas pensar, sobre todo en una época en la que se tiende ahorrar y a mirar «la pela» en todo momento. Pero si en algo no se debe escatimar es en los neumáticos, pues nuestra seguridad depende de ellos más que ninguna otra parte de la moto.

El otro ahorro. Si tu intención es ahorrar en neumáticos, lo que tienes que hacer es alargar su vida cuando los tienes nuevos. Para empezar, revisa habitualmente la presión (también porque de ello depende el comportamiento de la moto). Igualmente debes realizar una conducción más suave. No estamos diciendo que te olvides de ir a tu carretera de curvas favorita, sino que dejes los acelerones fuertes, sobre todo en ciudad, donde no tiene mucho sentido conducir así y eso «se come» y deja plano enseguida el neumático trasero. Otro elemento determinante es el peso: si no vas a salir de viaje, ¿para qué llevas montadas las maletas a diario? Y encima, con ellas puestas, restas movilidad y aumentas las probabilidades de romperlas.

10 motivos para cambiar de neumáticos

1. El principal motivo por el que tienes que cambiar los neumáticos es para no tener una caída. Esta razón ya debería ser suficiente para cambiarlos sin leer ninguna más.
2. Si no te importa tu integridad física, piensa en que en la moto no vas tú solo, en el asiento trasero va tu acompañante y depende igualmente de tus ruedas.
3. El ahorro en los neumáticos es «pecata minuta» en comparación con la reparación en el caso de que tengas un simple arrastrón. Y no hablemos de una caída más fuerte.
4. Por supuesto, si el dibujo está por debajo de lo estipulado legalmente, las fuerzas de seguridad te pueden multar. ¿Sigues creyendo en el ahorro?
5. Para convencerte de que puedes seguir con las ruedas gastadas piensas en el dinero. Ten en cuenta tu salud y seguro que ya no lo ves tan claro.
6. Con las ruedas gastadas no vas a pasar la ITV. Es una de las primeras cosas que miran en sus instalaciones.
7. Si decides cambiar las ruedas, igual consigues algún tipo de revisión gratuita en tu moto. Aprovecha todas las promociones que ofrecen las casas.
8. Piensas vender tu moto y lo vas a hacer con las ruedas viejas. Lo llevas claro, el posible comprador va a ser lo primero que mire y te va a pedir, si es que la quiere, que le bajes el precio.
9. Si no cambias las ruedas porque confías en tu habilidad para ir en moto, que sepas que lo que no puedes controlar es el resto de trampas que hay en la carretera, como charcos o arenilla.
10. Con el dinero que te has gastado en un accesorio innecesario, podrías haber cambiado las ruedas unas cuantas veces. ¿Te compensa el gasto?